Mural en el Liceo de Piriápolis "José Luis Invernizzi", realizado por los estudiantes | Autor de la imagen: Uruguay Educa | Licencia: Licencia Creative Commons Atribución-CompartirIgual 4.0 Internacional.
Pero no solo este hecho es signo de la jerarquía universal de este escritor, así lo indican también los premios recibidos a lo largo de su vida: en 1961 obtuvo un segundo puesto en el concurso de cuentos organizado por la revista Life con “Jacob y el otro”, entre 3.149 originales presentados; en 1962, el Premio Nacional de Literatura; en 1967, el segundo lugar en el concurso Rómulo Gallegos, de Venezuela, el triunfador, Mario Vargas Llosa, reclama para Onetti “el reconocimiento que se merece”; en 1972, Onetti fue elegido como el mejor narrador uruguayo de los últimos cincuenta años en una encuesta realizada por el semanario Marcha, en la que participaron 35 narradores y poetas de distintas generaciones; en el mismo año, se tradujo al italiano El astillero (Il cantiere), que tres años después obtuvo el primer premio a la mejor novela latinoamericana publicada en esa lengua en el período 1971-1973; en 1980, el rey Juan Carlos de España le entregó el Premio Cervantes de Literatura; en 1990 recibió el Premio de la Unión Latina de Literatura “por su espíritu universal”; en 1991 obtuvo el Gran Premio Rodó a la labor intelectual, de la Intendencia de Montevideo, con un monto cercano a los cinco mil dólares que de inmediato donó para la compra de libros en bibliotecas municipales; y un mes antes de su fallecimiento, en 1994, con el auspicio del Ministerio de Educación y Cultura, la Intendencia Municipal de Montevideo y la revista Cuadernos de Marcha, se realizaron, en la Facultad de Humanidades y Ciencias, las Primeras Jornadas Rioplatenses de Literatura, en homenaje al escritor.
Vivió un cuarto de siglo entre Buenos Aires y Montevideo, capitales de cuya síntesis surgiría Santa María, ciudad en donde se ubican algunas de sus obras. Fue encarcelado en 1974, durante la dictadura de Juan María Bordaberry. A principios de 1975, Onetti partió hacia España, invitado por el Instituto de Cultura Hispánica de Madrid, ciudad en la que finalmente fijó su residencia, para no volver más a Uruguay. Cuando en 1985 se instaura la democracia en nuestro país, el presidente electo, Julio María Sanguinetti, lo invita a la ceremonia de instalación del nuevo gobierno, el escritor agradece la invitación, pero decide permanecer en Madrid.
Juan Carlos Onetti es considerado el maestro de la Generación del 45, generación fuertemente cosmopolita, comprometida social y políticamente con Uruguay y América Latina, influida por el pensamiento de Jean Paul Sartre y por la Revolución Cubana de 1959. Sin embargo, discutió siempre la noción de compromiso del escritor que los más jóvenes del 45 pregonaban. Decía el maestro: “Escribo para mí. Para mi placer. Para mi vicio. Para mi dulce condenación”.
Los temas que se desarrollan en sus obras son la corrupción de la sociedad, sus efectos sobre el individuo, la incomunicación. Sus protagonistas son proclives a la inacción, escépticos, fracasados; el mundo en el que se mueven es urbano y descripto como deprimente y pesimista. Parafraseando a Mario Benedetti, se puede afirmar que el mensaje que el autor, a través de su literatura, transmite al lector es el malentendido global de la existencia, el desencuentro del ser con su destino. Sus personajes flotan en un plano que tiene algo de irreal, de alucinado, y con escasos datos verosímiles. Onetti intenta introducirse de lleno en la vida y lo dramático es el fracaso de ese intento comprobando la ajenidad, la forzosa incomunicación de su personajes.
A Onetti se lo considera el escritor de la angustia, con claras influencias de Dostoievski, Conrad, Faulkner e incluso Roberto Arlt.
Entre su vasta obra se encuentran:
El pozo (1939)
Tierra de nadie (1941)
Para esta noche (1943)
La vida breve (1950)
Los adioses (1954)
Para una tumba sin nombre (1959)
La cara de la desgracia (1960)
El Astillero (1961)
El infierno tan temido (1962)
Tan triste como ella
Juntacadáveres (1964)
Jacob y el otro, Un sueño realizado y otros cuentos (1965)
Las máscaras del amor (1968)
La novia robada y otros cuentos (1968)
La muerte y la niña (1973)
Tiempo de abrazar (1974)
Réquiem por Faulkner (1975)
Dejemos hablar al viento (1979)
Cuentos secretos: Periquito el Aguador y otras máscaras (1986)
Presencia y otros relatos (1986)
Cuando entonces (1987)
Cuando ya no importe (1993)
Confesiones de un lector (1995)
Onetti murió el 30 de mayo de 1994, en una clínica de la capital española, ciudad en la que vivió durante 19 años.
Realizado por: Profa. Iris Caramés Beltrán.