
¿QUÉ CONMEMORAMOS EL 3 DE DICIEMBRE?
Los 3 de diciembre de cada año desde 2006 se celebra y conmemora el Día Nacional del Candombe, la Cultura Afrouruguaya y la Equidad Racial, así declarado por la Ley 18.059.
Es la fecha de conmemoración de la resistencia de la comunidad afrouruguaya ante las medidas discriminatorias dispuestas por la dictadura militar, que impuso el desalojo de los edificios de alquiler denominados “conventillos”, habitados mayoritariamente por la población negra afrodescendiente en sus tradicionales barrios Sur y Palermo.
Hoy tiene el significado de valoración y reconocimiento a la comunidad afrouruguaya y a su cultura en sus diversas manifestaciones, cuya máxima expresión es el Candombe.
Recordamos la significación de esos hechos y su simbolismo de reafirmación de identidad y demostración del poder de la cultura para impulsarnos a superar adversidades, preconceptos, derribar las fronteras invisibles pero dolorosamente tangibles del racismo y la discriminación, y de unirnos por encima de nuestras diferencias.
El 3 de diciembre de 1978, sonaron por última vez los tambores de candombe en el “conventillo Mediomundo” ante su desalojo, al que seguiría el de otros conventillos como el de “Ansina”, íconos de la cultura negra uruguaya, con el consiguiente traslado de muchos de sus habitantes a la periferia de la ciudad.
Fuente: Casa afro uruguaya

Entrevistamos a Javier Cufós para conocer sus vivencias
Nos dice : " No recuerdo en que año fue mi primer día del candombe, fue hace ya algunos añitos, invitado por la comparsa Kilombo del gran Máximo Silva. Recuerdo que ni el calor del día, ni las horas de espera opacaron el desfile que luego hicimos, tampoco me importo mucho no ser el bailarín principal, lo diosfrute desde que llegamos hasta que terminamos. Eso sí...aprendí algunas cosas que sólo la experiencia te da, zapatos cómodos, nunca más zapatos a estrenar, vestuario acorde a la estación y la espera no hacerla parado, aunque la ansiedad te quiera ganar.
Fue todo ganancia, pisar isla de Flores fue un placer que jamás podré olvidar y que este año lo extrañe muchisímo.
El candombe tiene ese que se yo que te recicla. Por eso conmemoremos el día del candombe y la equidad racial. Que sea lo que es, un día de reflexión para que las desigualdades cada día sean menos."

Agradecemos las fotos a Javier Cufós
Conversamos con Catalina Nuñez
Catalina quien se define como apasionada por el Candombe va a defilar por primera vez en una comparsa con la que ensaya todos los domingos en una comparsa de Playa Pascual llamada "La que mueve ciudad del Plata". Tratando de recoger su experiencia le pedimos que hiciera una nota donde contara que siente en relación al Candombe y qué representa para ella el día 3 de diciembre:
Transcribimos sus palabras:
Candombe
Quien no ha sentido el vibrar del tambor por las callecitas del Barrio Sur y Palermo, si hasta parece que las casonas bailaran al ritmo que subyuga a muchos. Isla de Flores renace en cada toque, en cada “llamada”, revive añoranzas y sueños de libertad, añoranzas de pueblos lejanos, de sonidos, de naturaleza, de vida, de libertad.
Hoy “Las llamadas” es una gran fiesta donde razas, credos y diversidad celebran la gran fiesta negra, ¿qué paradoja verdad?, el pueblo esclavo, humillado y agredido hasta lo más profundo de sus ser nos deja como legado la fiesta popular uruguaya más importante culturalmente hablando, que trasciende fronteras y que nos diferencia de nuestros hermanos americanos por sus características únicas.
En lo personal me cuesta contener las lágrimas al pasar de la comparsa y no puedo dejar de pensar en los orígenes de esta fiesta de superación, en el orgullo intacto, en la sangre reverberante, en guerreros oprimidos pero de espíritus indomables. No puedo dejar de pensar en esas mamas viejas que amamantaban el hijo del blanco, mientras los propios quedaban a expensas de un mundo de pestes e inundaciones detrás de la muralla del Montevideo antiguo.
Hoy la gran fiesta es el espíritu de la resiliencia, del combate permanente por la igualdad de oportunidades, lucha que aun hoy es necesario batallar.
Desde mi yo interior quisiera pedir perdón, perdón por la desigualdad, perdón por el dolor y un enorme gracias por devolverlo con el corazón humilde, por todo lo dado, por todo lo enseñado, pero sobre todo, gracias por poder vivir la fiesta hermanados.
Catalina Núñez
